Los proyectos de agricultura siempre han sido otro de los objetivos prioritarios de los proyectos desarrollados en Hushé, por la Fundación Sarabastall, convencidos que la mejora de la agricultura, permitía mejorar la alimentación, y por tanto la salud de los habitantes del valle. Y además el incremento de producción servía para apoyar los ingresos mínimos que las familias tienen.
Pero la agricultura en el Valle de Hushé se enfrenta a dos grandes problemas, por un lado es una zona montañosa, a más de 3.000 metros de altitud, y la composición de la tierra, es muy arenosa, eso la hace muy permeable, retiene muy poco la humedad y aunque llueve bastante, la tierra no es fértil. Se suma la climatología, ya que buena parte del invierno soportan temperaturas inferiores a -20º, están cubiertos de nieve y las tierras no pueden ser cultivadas, por lo que los periodos de producción se acortan mucho.
Por todo ello, y en proyectos anteriores se ayudó a las familias, por medio de microcréditos a cambiar las semillas, para sembrar variedades más acordes a la zona, a cambiar protocolos y a ir introduciendo variedades de árboles y cultivos que pudiesen dar frutos en una zona tan complicada.
En la actualidad, la Fundación Sarabastall ha comenzado a desarrollar un nuevo proyecto en la zona: la instalación de invernaderos. Se ha construido un primer invernadero y ya se está viendo que su uso favorece el crecimiento de las plantas y su cuidado. Sirve para aprovechar mejor la luz del sol y para paliar las bajas temperaturas.
El proyecto se plantea, seguir instalando algún invernadero más, y especialmente formar a los hombres y mujeres en su atención y utilización y a través de microcréditos favorecer que más familias puedan hacer uso de esta nueva herramienta.